MI VISIÓN DE EUROVISION

Columna de opinión basada en la pasión que siento por el concurso, aderezada con unas gotitas de ironía, una pizca de acidez y puñados de diversión, que se actualizará diariamente abordando desde los temas de más rabiosa actualidad en el micromundo del Certamen Europeo, hasta los momentos inolvidables de la historia del Festival de la Canción.

05 marzo 2014

FRANCIA 2001


Buenas tardes amados eurolectores,

Menos mal que yo no sólo tengo mi alma, sino que también cuento con mis manos para poder escribiros cada día una entrada diferente que os entretenga y os descubra nuevos horizontes dentro del festival.

Y la entrega de hoy es una de las baladas más bellas de los dos miles. Como no podía ser de otra manera pertenece al listado de candidaturas que ha presentado a lo largo de la historia Francia, que bajo mi punto de vista es el país que ofrecido los mejores temas relativos a ese género musical.

Tras los tres descalabros galos en las ediciones de 1998, 1999 y 2000, siendo este último año en el que también se dejó de pasar Espoir (Esperanza) que quedó segunda en la preselección en la que ganó On aura le ciel (Tendremos el cielo), y con ello la más que posible pérdida de su sexta victoria en el ESC...

 

... en el año 2001 la cadena nacional del país elige de modo interno a la canadiense Natasha St-Pier, la cual es de origen acadiano y tenía 20 años de edad en aquel instante.

La artista había comenzado su carrera en 1992 siendo una niña con 11 añitos. En 1996 sacó a la venta su primer disco en Canadá, y el segundo titulado À chacun son histoire en el año 2000, que fue el primero que se lanzó en Francia y Bélgica, consiguiendo un disco de oro. Por lo que ese mismo año France 3 se fijó en ella, una joven nobel poco conocida, para lucir la tricolor en nombre de la televisión pública. 


La canción propuesta por la discográfica fue Je n'ai que mon âme (Solo tengo mi alma), que era una pieza compuesta por J. Kapler y M. Jones con mucha cuerda y órgano y una base de percusión muy sencilla y elegante.

La sentida letra, en la que una chica que es abandonada por su pareja se da cuenta de que después de su marcha está sola y que tan solo le quedan su alma y su voz, fue interpretada en francés e inglés quedando deslucida y en un escenario que no facilitaba que las cámaras recogieran la interpretación que necesitaba el tema para llevarse la victoria que merecía.

Añadiendo además que su veraniego vestido rojo y su maquillaje de meretriz victoriana (como me gusta a mí calificarla) le daban un aire de señorita de compañía del barrio de Montparnasse jijiji.

Todos los errores anteriores relacionados con la candidatura le hicieron perder el festival, siendo favorita y quedando finalmente 4ª con 142 puntos y a cinco de la rival a batir, Grecia con Antique. Y es que los representantes de Estonia y Dinamarca se colaron en el Top 2 sin comprender trece años después el porqué de semejante bodegón impresionista. 


La elegante Natasha obtuvo votos de todos menos los petardos malteses adictos al cuadro y a Azerbaiyán, y doces de Bosnia & Herzegovina, Rusia y Portugal, utilizando los dos primeros jurado, así que se demuestra quién tiene sentido común a la hora de elegir al premiado.

Para cerrar la presentación del día os dejo el videoclip de que se utilizó como tarjeta de presentación del tema porque nuestra la imagen que debería haber lucido la cantante para ganar.


Eurobesos para todos y mañana una canción para que os quedéis conmigo ;)

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